Últimamente se está poniendo de moda el uso del cargador que traen de serie los coches eléctricos e híbridos enchufables como toma de energía habitual en un enchufe de casa, de los de toda la vida. Y eso es un gran error, además de entrañar importantes riesgos.
En el manual de tu propio vehículo definen ese cargador como “ocasional o de emergencia”. Por tanto, no parece muy adecuado para un uso rutinario, ¿no?
Esto es lo que te puede pasar si cargas tu coche en un enchufe normal:
El enchufe permite la carga a unos 8-10 amperios, es decir, muy lenta: necesitarás tener tu coche enchufado durante 20 horas seguidas. Esto sobrecalentará la batería de tu coche, acortando los ciclos de carga y, por tanto, su vida útil.
El enchufe de casa no está preparado para soportar esto, lo que conllevará un sobrecalentamiento, y, en el mejor de los casos, que se queme “solo” el enchufe, porque puedes provocar desde un cortocircuito hasta una avería importante en toda la instalación eléctrica de tu vivienda. E incluso que el enchufe de la pared, al derretirse, se funda al conector del coche… y puedes imaginar el precio de reparar ese desastre.
Además, con los precios que tienen hoy los puntos de recarga convencionales, estarás asumiendo un riesgo absurdo que te evitarías con una inversión mínima (desde 300€, con el Plan Moves)
No te la juegues: enchufa tu eléctrico en un punto de recarga preparado para ello. Y, el cargador de serie, como el propio fabricante indica, úsalo sólo para emergencias.
A la hora de comprar un coche eléctrico, una de las dudas más habituales por parte de la gente que vive en edificios comunitarios es saber si pueden instalar un punto de recarga en su garaje, y cómo hacerlo.
La respuesta, en principio, es afirmativa. Y vamos a tratar de explicarte con más detalle los supuestos en los que te podrás encontrar.
Cuando la plaza de garaje se encuentra en la misma comunidad de propietarios que la vivienda, y nada más que requiere llevar un cable de un punto a otro. Éste es el caso de la mayoría de las personas que viven en edificios comunitarios.
En este supuesto, debes saber que tras la última modificación de la Ley de Propiedad Horizontal, si vas a instalar un punto de recarga en tu plaza de garaje, sólo debes comunicarle a la comunidad lo vas a hacer, sin necesidad de pedir permiso ni de que haya ningún tipo de votación.
Cuando tienes una plaza de garaje en un edificio en el que no vives. En este caso, puedes contratar un nuevo suministro, y lo puedes hacer de dos maneras: independiente del suministro del garaje, o conectado a éste.
Si tu instalación es independiente, tan sólo deberás comunicarlo a la comunidad, sin ningún tipo de autorización.
En el segundo caso, la cosa se complica, ya que podrías tener que ampliar la potencia contratada, instalar un protector contra sobretensiones, o instalar un contador secundario para tu punto de recarga, entre otras cosas.
Por eso, aunque la ley contempla que para instalar ese punto de recarga no requieres autorización, todos esos trámites previos sí necesitarían un acuerdo, teniendo en cuenta que es la comunidad de propietarios la titular del suministro al que te quieres conectar (aunque pagues tu parte con un contador independiente).
Cuando la mayoría de tus vecinos quiere adaptar el garaje a los puntos de recarga. En grandes ciudades se está empezando a ver esta situación: para evitar problemas futuros y, sobre todo, para unificar un poco los criterios, hay comunidades que están optando por hacer una preinstalación en su garaje, es decir, dejarlo preparado para que cualquier propietario que quiera luego instalar un punto de recarga tenga ya todo listo.Se trata de un tipo de obra que ya prevé contadores independientes, seguridad para prevenir sobrecargas, y tiene además en cuenta la potencia contratada.
Aunque podría parecer la solución más cara, lo cierto es que para la vivienda de nueva construcción está siendo ya la más solicitada. Y, para los edificios ya existentes, empieza a haber subvenciones en las Comunidades Autónomas destinadas a estas instalaciones (o preinstalaciones) troncales.
Desde Movelco, como empresa de soluciones globales de movilidad eléctrica, realizamos también este tipo de preinstalaciones.
En el caso que citamos de edificios ya existentes que quieran hacer esa preinstalación, cualquier propietario puede solicitarlo, y debe ser acordado por un tercio de los miembros de la comunidad que representen, a su vez, un tercio de las cuotas, con la particularidad de que, de salir adelante, el coste no se podrá repercutir sobre los propietarios que votasen en contra.
¿Qué aconsejamos desde Movelco?
Desde nuestra experiencia en Movelco, si vas a instalar un punto de recarga, te aportamos tres soluciones muy claras y sencillas, pues nosotros te lo tramitamos todo.
Si vas a instalar el punto de recarga en el edificio donde vives, te realizamos el estudio y la instalación y nos encargamos de todas las gestiones para que tú sólo tengas que preocuparte de enchufar tu coche.
Si tu plaza de garaje se encuentra en otro edificio, estudiaremos tu caso concreto para analizar si económicamente te resulta mejor una nueva instalación o conectarte al suministro del garaje, en cuyo caso podremos contactar también con tu administrador para despejarle cualquier duda.
Si vas a mudarte a un edificio aún en construcción, nos pondremos en contacto con los promotores inmobiliarios para ofrecerles nuestra solución de preinstalación para garajes comunitarios.
Lo primero que debes saber a la hora de cargar tu coche eléctrico es que existen tres tipos de recarga, en función de la potencia de los cargadores y, por lo tanto, su velocidad: la convencional, la semirrápida y la rápida.
La recarga lenta o convencional es la que utilizamos en nuestras viviendas, la de los enchufes “normales”. La potencia eléctrica es de aproximadamente 3,7 kW, con lo que tardaríamos unas 8 horas en cargar nuestro coche. No obstante, es recomendable el uso de cargadores monofásicos específicos para vehículos eléctricos. El sistema es ideal, por ejemplo, si tienes posibilidad de dejar tu coche cargando toda la noche.
La recarga semirrápida es la que se realiza a través de cargadores con tomas trifásicas, más habituales en empresas, oficinas, parkings públicos, hoteles, supermercados, hospitales… Su potencia es de hasta 22 kW, con lo que el vehículo se cargaría en poco más de una hora.
La recarga rápida es la que encontramos en las electrolineras. Son los llamados súpercargadores, con una potencia mínima de 50kW, capaz de recargar tu coche en 15 minutos, a lo sumo 20.
Ejemplo práctico para entender el tiempo de recarga de un coche eléctrico y su coste
n vehículo de gasolina puede tener un depósito de 30, 50 o 100 litros (por ejemplo). Es evidente que tardamos más en llenar un depósito grande que uno pequeño (por capacidad de litros ), y también tardamos más en llenarlo si lo hacemos gota a gota que con un surtidor de una gasolinera… Y, por supuesto, no nos cuesta lo mismo llenar un depósito de 30 litros que uno de 100 litros.
Pues bien, con un vehículo eléctrico sucede lo mismo. Existen modelos y vehículos con 30, 50, o 100 Kw (por ejemplo) de capacidad de almacenamiento posible en las baterías que tiene instaladas.
Si lo “llenamos” o enchufamos a un cargador de carga rápida, semirrápida, lenta o convencional tardaremos más o menos en llenar o cargar las baterías.
Lo mismo sucede con el coste: llenar una batería grande es más caro que una pequeña. Es evidente.
Simplificando mucho, una fórmula rápida y básica para entenderlo sería la siguiente:
Imaginemos que vamos a cargar un coche con 40 Kw de baterías, como un Renault ZOE o un Nissan LEAF (recordemos que dependiendo de los modelos unos aceptan carga rápida o semi-rápida… pero todos aceptan carga lenta convencional):
Si lo cargamos en carga lenta a 3,7 Kw/h ( imaginando que estuviese totalmente vacío, que nunca es el caso, y lo llenamos) tendríamos que:
Fórmula : 40 Kw / 3,7 Kwh = 10,8 horas
Si los cargamos en carga Semi-rápida (Trifásica) a 22 Kw/h (imaginando de nuevo que estuviese totalmente vacío):
Fórmula : 40 Kw / 22 Kwh = 1,8 horas
Si los cargamos en carga rápida a 400 Kw/h ( una vez más, como si estuviese totalmente vacío):
Fórmula : 40 Kw / 400 Kwh = 6 minutos
¿Cuánto cuesta recargar mi coche eléctrico?
En cuanto al coste, es evidente que saldrás ganando respecto a un coche convencional de combustión, pues cargar tu vehículo eléctrico te costará poco más de un euro cada 100 kilómetros… frente a los 7 euros y pico que gastas, en recorrer la misma distancia, con un diésel.
¿Qué cargador comprar?
A la hora de comprar un cargador, lo ideal es que te dejes asesorar por profesionales como los que trabajamos en Movelco, donde estudiaremos tus necesidades y buscaremos el punto de recarga más apropiado para ti, tanto si eres particular como empresa.
Nosotros te gestionamos todo, te hacemos la instalación, y te ofrecemos nuestro servicio postventa.
Esto es importante ya que existen diferentes cargadores también según el tipo de coche que tengas, que va a determinar también con qué tipo de “enchufe” te puedes conectar.